26.4.07

Vaharada -dióxido- XII

La aceptación de lo terrible lo pudre todo.
Miguel Angel Podestá (Cantautor)
Y acuden muertos vitrificados, parpadeantes.
Y se clava mi indeferencia de sobremesa.
Y los siguen asesinatos,
sin víctimas mortales,
con víctimas mortales,
mortales de necesidad
(voluntades,
confianza)
Más tarde,
siempre demasiado pronto,
acuden los desprecios legales,
tal vez acompañados
por esa historia derrumbada.
Ahonda aun más la aguja de mi indiferencia de sobremesa.
Y pregunto el punto de putrefacción
a mi alma,
a mis ojos
y a mi lengua.
Se descomponen lentamente
por no pronunciar la acusación
sobre la evidencia.
Tan culpable yo
como el que alza el arma
(metálica,
de papel,
de hambre)
Tan culpable...
como el resignado
a una vida tenue.

1 comentario:

dúo Sortilegio dijo...

Grande Miguel Ángel Podestá. Ojalá pudiéramos contactar con él. Hace 10 años que le perdimos la pista.

Un abrazo.